La vieja regla de oro

Hola roleros, hoy os toca cobrar a vosotros.
Los que seáis mas de la vieja escuela1 ya habéis leído innumerables veces esta anotación que los libros de rol nos dejan a los directores de juego en la sección «Cómo dirigir» o similares.
Voy a coger el manual más cercano y os voy a leer esa parte:
Estas reglas son una serie de guías preestablecidas, pero no hay nada escrito en piedra.
Manual de Mythras.
Es una regla tan básica, que nace de forma innata en muchos directores de juego (DJs). Aunque no en todos… Y puede haber motivos para ello.
Nos aferramos a las reglas

Para un jugador, su personaje puede ser un simple conjunto de características representadas en un folio con el cual puede calcular que acciones tendrán éxito. Otros jugadores pueden hacer durante la concepción de un personaje o de forma posterior una inversión emocional fuerte. Ambos son bastante distintos2 pero ahora tienen en común algo: No quieren que su experiencia quede frustrada por la arbitrariedad del narrador.
Imaginemos una situación tensa: Los personajes corren peligro de muerte3. El DJ ha hecho unas excepciones en las reglas que los ha perjudicado. Comienzan a saltar argumentos, aludiendo a las reglas del manual. De pronto, la mesa ha pasado de jugar una partida de rol a ser un juzgado.
Jugamos con sistemas de juego reglados con la finalidad de poder resolver las situaciones más tensas de una forma procedimental. La inversión de nuestros jugadores en sus personajes y nuestras campañas se aferra a unas garantías de que sus esfuerzos no estarán sujetos a la arbitrariedad.
Pero entonces, ¿la regla de oro? Enseguida iremos a eso.
El DJ robot

Dado lo anterior, podríamos pensar que el DJ debería ser entonces un interprete absoluto de las reglas, eso nos daría la seguridad de que podremos disfrutar y resolver las situaciones que nos plantee de una forma justa. Un DJ que no hace excepciones. Para lo bueno… y para lo malo.4
¿Y qué pasa cuando un jugador tiene una idea que causaría una escena muy satisfactoria, pero que en las reglas no está contemplado? Con un DJ así ni siquiera lo intentará, sabe que no le van a dejar.
¿Y cuando debido a un seguimiento estricto de las reglas una escena se alarga hasta volverse tediosa? Nos queda una mesa de jugadores aburridos y frustrados que solo quieren que dejar de agonizar en una escena eterna. Lamento el hecho de que no me haga falta imaginar ese supuesto.
No se vosotros, pero yo echo en falta la picardía del DJ en momentos así. Por desgracia, muchas veces cedemos a la impotencia, el tedio y la frustración por evadir el conflicto.
Pues surgen conflictos si un DJ exceptúa una regla para un jugador pero no para otro sin razón aparente, si la situación es tensa o en general, si la sensación que deja esa situación es que ha sido arbitrario.
Son conflictos que evades siendo un robot, a costa de todo lo anterior.
Romper las reglas sin ser arbitrario

adj. Sujeto a la libre voluntad o al capricho antes que a la ley o a la razón.
Acepción primera del término «arbitrario, ria» en el diccionario de la Real Academia de la lengua Española.
Te conoces las reglas del juego de pé a pá. Sabes cual es su finalidad y las interpretas dentro de tu estilo para crear un mundo donde tus jugadores disfruten interpretando a sus personajes y formando parte de tus historias.
La escena se alarga demasiado, sabes que si sigues las reglas a rajatabla, todavía queda mucho para terminarla. Pero ellos están sufriendo, se aburren, se tiran de los pelos, están enfadados. No es el tipo de enfado o preocupación que les mete en su personaje, es el tedio que les impide involucrarse, disfrutar, divertirse. ¿Es que no piensas hacer nada?
Míralo, tu otro jugador está intentando utilizar el entorno de una forma que ni tú ni el propio libro de reglas había previsto. Vaya, vas a tener que castigarle por gastar su turno en ser creativo en lugar de ser un buen chico y limitarse a ‘pegar’ al malo como el resto. ¿Es esa la clase de DJ que quieres ser?
Tus jugadores han vuelto a ver como rompías las reglas y no comprenden el motivo, se sienten indefensos, no por que la situación en la narración les ha llevado a ello, si no por que tú, como DJ les desarmas. ¿Crees que van a seguir jugando, invirtiendo su tiempo y sus emociones en tu circo?
Dirigir un juego de rol te pone en una situación de responsabilidad. Tus jugadores confían en ti para hacer que el tiempo y las emociones que invierten en sus personajes y en tus historias valgan la pena. Sé responsable.
Conclusión
Tu primera prioridad como DJ no debe ser «interpretar bien las reglas» o «contar historias», eso son los medios que sigues para tu verdadera responsabilidad: Que tus jugadores disfruten.
Para lograrlo interpretarás las reglas a rajatabla cuando eso sea necesario para el disfrute y las romperás cuando éstas lo impidan. Sin arbitrariedad, siempre con la verdadera razón en mente.
Escribid, que no os hará daño.
Notas al pie
[1]: La forma suave de referirse a los quemaos que tenéis estanterías combadas de la cantidad de libros de rol con variedad distinta de sistemas de juego.
[2]: Será contenido a tratar en entradas futuras.
[3]: No tiene por qué ser muerte física, como explica Gabriella Campbell en este vídeo, existen distintos tipos de muerte que puede experimentar un personaje.
[4]: Me estoy dando cuenta del debate filosófico sobre la justicia que puede parecer que subyace a todo el texto de esta entrada… Vengo a declarar que es totalmente accidental y que soy mas plano que una hoja de papel, no hay ninguna intencionalidad oculta.
1 Comment
[…] podrían contravenir algún plan que ya tengáis, pero como ya sabéis, estáis jugando a rol y lo que hagáis en la mesa es cosa vuestra, mientras no seáis arbitrarios e injustos podéis adaptar todas las reglas al vuelo para ofrecer […]